Se raja mucho de cómo se traducen los títulos de las pelis en España. A menudo, con razón. Sin embargo, también existen grandes aciertos que incluso superan al título original.
Aquí va una docena de estos casos:
01.- Mucho mejor juego de palabras.
02.- Más sencillo. Más entendedor. Mejor título.
03.- Si una peli no es muy memorable, al menos que su título sí lo sea. Además, ojo a las estadísticas del título de la versión española: 4 palabras, 4 verbos, 3 gerundios. Merece toda nuestra admiración.
04.- Curdled podría haberse titulado literalmente: Cuajada. O más libremente: ¡Vaya cuajo!. No obstante, la gente no tenemos muy en mente que la sangre se cuaja, así que para hacerse una idea inequívoca de qué va la peli quizá funciona mejor el título de la versión española.
05.- Más corto y con regusto a latinajo. Mucho mejor.
06.- Rififí era el thriller noir francés que lo petó a mediados de los 50. Poco después se estrenó I soliti ignoti, comedia italiana sobre ladrones de poca monta. A la hora de traducir el título en España se optó por parodiar el nombre del film francés: Rufufú. Y así ha perdurado.
07.- No es una peli, es una serie. En Italia supieron encontrar un título mucho mejor que Knight Rider ―y que El coche fantástico―. Tal vez era un título que en otros lugares ya estaba registrado, pero eso son temas legales que nosotros, como inocentes espectadores, ignoramos.
08.- Up the Creek significa literalmente «arroyo arriba» y, como frase hecha, «en problemas». El título español pasa de dobles sentidos y opta por una solución tan patillera como memorable (para más inri, en realidad la peli no pertenece a la saga de los albóndigas de Bill Murray).
09.- Podrían haberlo traducido simplemente como La fiesta. Encontraron una palabra todavía mejor.
10.- Mucho más claro un numeral cardinal que el nombre de una de las comidas del día. Doña Enid Blyton Parera también lo sabía.
11.- El título original juega con la palabra chupete, que en inglés es muy imponente: pacifier. El título de la versión española se la juega a un ripio que jamás podremos olvidar. No obstante, el premio se lo lleva el título de la versión alemana, es muy gilipollas pero funciona de puta madre.
12.- Una palabra mucho más específica que «apartamento» y mucho más divertida.
13.- Vale, este me lo acabo de inventar, pero no me digáis que no es infinitamente mejor que el título original.
Si tenéis curiosidad por las traducciones creativas muy libres, os invito a que leáis mi tira cómica Niña pija y comparéis la versión original en español con las versiones en inglés y en catalán. Hay chistes imposibles de traducir que han sido brillantemente adaptados.
Todas las versiones de Niña pija en distintos idiomas están disponibles en esta misma web.